viernes, 6 de mayo de 2011

¡Por fin es viernes!

Por fín, por fin es viernes ¡Que semana más larga y que día más intenso!
Hoy me han escupido, vomitado y contestado en inglés. A todo esto tenemos que unir mi mal estar estomacal. La puñetera regla aún no ha hecho acto de presencia (no sé seguro si este mes bajará) y me tiene el estómago bien jodido amén de otras muchas cosas más.
Os voy a contar más  o menos como me fue el día.
LDC hoy estaba bastante alterada por una vez con razón (aunque no entraré en detalles,porque no viene al caso) Me hizo llegar tarde a su casa y después me pidió un millón de cosas. Lo que me hizo correr como una loca durante las dos horas que estoy en su casa, para que me diera tiempo de hacerlo todo.
Cuando salí de casa de LDC vi como el autobús que tenía que coger se iba en mis narices. Asi que tuve que esperar unos 10 minutos a que llegara el siguente. Lo que me hizo tener que correr para llegar a tiempo a la guardería.
Cuando por fin conseguí llegar, se notaba que era viernes. Hasta a los enanos les afectan estas cosas, estaban si es que es posible, más descontrolado de lo normal. En el patio se ha revoleados unos sobre otros, han tirado el agua al suelo y estrellado la pelota  contra el árbol. Y a  medida que transcurria la mañana la cosa no ha ido mucho mejor. Para comer había  lentejas de primero (HORROR) a excepción de Miguel (el niño que come casi de todo) el resto intentaba darnos "coba" e intentar convencernos de que se habían comido el dichoso potaje. Lo que ellos no parecían comprender, es que cuando el potaje tiene "cardito" no sirve que lo "marees" con la cuchara. Porque todo vuelve a su sitio y se nota que no comes.
Los que toman comida pasada la liaron, Irene nos escupio y por más que intentabamos darle de comer ella lo volvía a tirar para fuera, y Pablo León me vomító encima (el bajo de mi pantalón acabó hecho un asquito) Pablo Perez se levantaba constantmente, se iba a jugar, no me hacía caso cuando le pedía por favor que se sentara (ese niño es un incordio con carita de ángel) Cecilia que para todo lo demás es más buena que el pan se pasaba sin exagerar cerca de 10 minutos con cada cucharada que conseguiamos meterle en la boca. Antes si quiera de plantearse masticarla. Y Cristina que tiene un año casi recien cumplido y que nació en Inglaterra y te habla en los dos idiomas. Lloró a todo pulmón en mi oido por lo menos media hora y gritando en inglés.
A toooooooodo esto tenemos que añadir que alguno de los niños se dedicó  a exparcir yogurt por el suelo de la clase. Mancharon juguetes, alfombra y a ellos mismos, tiraron las piezas de las construcciones y se metieron en el baño ¡Un día facilito vamos!
Afortunadamente hoy es viernes y tengo dos días para recuperarme, jajajaja porque de verdad  si tengo que soportar muchos días como el de hoy ¡ME MUERO!

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